Hace 2 días volvió a sonar el tema, a boca del titular de la Comisión de Educación del Parlamento, Rennán Espinoza, y obviamente los que estamos preocupados somos los jóvenes estudiantes de las universidades privadas, pues tememos que las consecuencias de este impuesto, afecte el futuro de nuestra educación como también la de nuestra institución.
Sin embargo hay que recalcar que el impacto de este impuesto podría tener una de estas 2 repercusiones: 1.- El cierre de la empresa educativa privada, 2.- Aumento de las pensiones cobradas por estas entidades.
Sé que muchas personas están de acuerdo con el pago de este impuesto, porque juzgan los intereses de los dueños de las instituciones, sin embargo no se ponen en los zapatos de los jóvenes que estudiamos y confiamos nuestra profesión en estas mismas instituciones . Y no reflexionan que si cierran nuestra universidad ¿a dónde vamos?, si aumentan las pensiones ¿tendremos que salir por no requerir con el dinero necesario para pagar?, creo yo, que estos son muchos de los puntos que no se han puesto a pensar la viceministra de Economía y el titular de la comisión Rennán Espinoza. Ojalá encontremos una buen solución a este problema.
todas las empresas tienen el mismo fin, generar dinero... todas deben ser capaces de pagar impuestos y generar ganancias...
ResponderEliminarhay mucha gente que quiere estudiar pero no puede pagar una universidad privada... esta gente tiene la opcion de estudiar en una universidad nacional... que hay pocas vacantes, que hay mucha competencia por estas vacantes, qye es nuy dificil ingresar, etc... son argumentos validos, pero el pedido al estado deberia ser el de crear mas universidades nacionales de calidad, no el de permitir que un grupo de empresarios continue enriqueciendose sin pagar impuestos... los impuestos pagan los sueldos de los empleados en los hospitales, colegios, universidades, municipios, etc...